La Criolipólisis es una técnica moderna y avanzada que tiene como finalidad eliminar las células grasas o adipocitos. Esta ofrece los mismos resultados que la liposucción, consiste en bajar la temperatura por debajo los cero grados con la finalidad de que las células se descompongan y puedan ser eliminadas,  sin ocasionar daños al resto de las células de la piel. Con  la criolipolisis, las células de grasa localizadas son destruidas mediante la cristalización y luego es eliminada de  forma progresiva en un tiempo de entre dos y seis semanas, el tratamiento es aplicado por un lapso de una hora aproximadamente en varias sesiones, las cuales son determinadas por un especialista.  

Para este tratamiento es necesario que el interesado acuda a una valoración con la finalidad de que un especialista determine las zonas del cuerpo que requieren ser tratadas y cuantas sesiones necesita. Cuando se va a comenzar con el tratamiento de criolipólisis, se coloca en las zonas que se van a tratar una membrana anticongelante para  que las bajas temperaturas no le causen daños a la piel. Seguidamente, se procede a preparar la máquina que se utilizará para efectuar  el proceso de criolipolisis. Esta es una máquina con una tecnología muy avanzada que permite la congelación de las células grasas, que serán disueltas a través del proceso metabólico natural del cuerpo. La máquina es programada con temperaturas que varían entre los 5º hasta los 10º bajo cero. La temperatura se establecerá de acuerdo con el área  del cuerpo que se va a tratar y la duración que tendrá  la sesión. El procedimiento es el siguiente: La máquina succiona la zona que se está tratando originando un vacío y lo congela hasta alcanzar aproximadamente los -4ºC o -5ºC. Esta temperatura se mantiene  aproximadamente por una  hora, que es el tiempo de debe durar una sesión,  con la finalidad de destruir las células de grasa localizada que se están tratando. Cuando ha pasado el tiempo de la aplicación el paciente puede continuar con sus actividades normales, el proceso continúa internamente ya que se inicia la eliminación de forma natural de las células de grasa localizada por un tiempo que varía entre dos y cuatro meses. Cuando finaliza el proceso, la cantidad de adipocitos disminuye, lo que permite que  desaparezca la capa de grasa localizada que puede cubrir el abdomen,  las caderas, los muslos en su parte interna y externa, los glúteos, la cara interna de la rodilla, los flancos, los pliegues de la espalda, los brazos o la zona inguinal. La última etapa del procedimiento es donde el paciente puede observar los resultados, que en muchas ocasiones significan hasta una reducción  de talla. Los resultados que se obtienen son permanentes, pero para ello el paciente debe mantener una dieta sana . En caso de ser necesario  puede repetirse la sesión sin ningún tipo de problemas.