Cuando una persona tiene poca saliva, lo normal es que las posibilidades de que sufra tanto caries como otro tipo de infecciones se multiplican bastante, además de que también son más propensas a padecer enfermedades de tipo periodontal por carecer de la protección que puede proporcionar la saliva. Por ello, se acumulan gran cantidad de bacterias en la boca, las cuales terminan siendo las responsables de otros elementos como puede ser la halitosis.
Es tan grave la deficiencia de esta saliva que incluso puede provocar daños en el estómago. Esto es debido a que la propia saliva cumple un objetivo importantísimo en lo que se refiere a la ingesta de alimentos, haciendo que cuando no hay cantidad suficiente, esta puede dificultarse de forma considerable y generar daños en la salud de las personas. Por ello, para poder combatir con la boca seca, es importante conocer las causas de origen de esto.
Las circunstancias por las cuales se puede desarrollar la xerostomía pueden ser de múltiples tipos, y para poder conocer cuál es el principal es necesario acudir a un dentista profesional que sea capaz de evaluar lo que ocurre y proponer una solución adecuada según cada caso. Se calcula que la xerostomía puede llegar a afectar hasta a un 20% de la población adulta de entre 18 y 30 años, siendo una patología bucal bastante frecuente y que requiere de intervención profesional.
Será por eso un odontólogo experto el cual evalúe cada situación y que en caso de que esta sea reversible, se pueda actuar a tiempo y de la manera adecuada. En caso de que la xerostomía se produzca debido al uso de un fármaco, la sequedad bucal terminará desapareciendo si se reduce la dosis o se deja de consumir, aunque esta no es ni mucho menos la única causa de que se produzca esta patología.
La sequedad bucal se define como una sensación subjetiva que hace que una persona no tenga suficiente saliva en la boca, y que provoca gran incomodidad a quienes lo padecen, además de también poner en peligro su salud.
Algunos de los motivos por los cuales una persona puede tener la boca seca pueden estar relacionados de forma directa con sus hábitos diarios: desde el consumo de alcohol, tabaco u otras sustancias nocivas, así como una mala alimentación pueden ser los causantes de que un paciente tenga xerostomía. Sin embargo, también es importante tener en cuenta que esta también puede ser provocada debido a ciertos tratamientos, fármacos o incluso determinadas enfermedades.
Algunas patologías, como el síndrome de Sjögren o la diabetes, pueden provocar sequedad tanto en los ojos como en la boca, y por eso los diabéticos suelen ser tan propensos a tener problemas que están directamente relacionados con sus encías. Este síndrome de la boca seca es un resultado directo de todas las alteraciones psicológicas que también afectan al sistema nervioso, especialmente la depresión, la ansiedad o incluso el estrés.
Por ello, una persona que padezca cualquiera de estas enfermedades es más propensa de padecer xerostomía, y en caso de presentar síntomas, será fundamental acudir a una clínica dental lo antes posible. Por otro lado, las personas que cuentan con implantes dentales dentro de la boca también son propensas a sufrir xerostomía, aunque no es una de las causas más comunes.
Se ha mencionado anteriormente que en caso de tener síntomas de poder padecer xerostomía será necesario acudir al dentista. No obstante, para ello será fundamental conocer dichos síntomas y cuándo presentarlos puede ser un indicador de que algo va mal. El síndrome de la boca seca se puede notar por diversos factores, los cuales van más allá de la incomodidad que pueda sentir una persona. Los más frecuentes suelen ser las dificultades para poder tragar, así como para masticar e incluso al hablar.
Por supuesto, tener la boca ardiente o pastosa y la garganta seca también son signos de que una persona puede estar sufriendo de xerostomía, así como tener los labios agrietados o la lengua excesivamente áspera. Si a todo esto se le suma que el paciente tenga mucha sed y sienta demasiada necesidad de beber agua, ello podría indicar que dicha persona padece del síndrome de la boca seca. Los resultados de esto son, como ya se ha comentado, la aparición de infecciones y de caries, además de otras enfermedades.
Por ello, en caso de presentar cualquiera de estos síntomas y que resulten demasiado incómodos como para que el paciente pueda hacer vida normal, será de vital importancia acudir a un dentista de confianza cuanto antes.
Para reducir la xerostomía, será necesario también el seguir una serie de recomendaciones que puedan ayudar a evitar todos los inconvenientes que trae el tener la boca demasiado seca. Para comenzar, el reducir el consumo de sustancias nocivas como pueden ser el alcohol o el tabaco será un paso fundamental.
Además de esto, aumentar la higiene bucodental para intentar prevenir cualquier infección también desempeñará un papel muy importante para combatir contra la xerostomía. Así, beber agua frecuentemente para evitar tener sensación de sed o reducir los alimentos que tengan demasiado azúcar puede ser vital para evitar padecer el síndrome de la boca seca. Sin olvidar, en ningún caso, que se deben hacer visitas recurrentes al dentista para que este pueda confirmar que todo está en orden.
No obstante, puede darse la situación de que el tratamiento para combatir esta falta de saliva sea algo más complicado de lo normal, e incluso existen otras ocasiones en las que esta puede ser aliviada con facilidad si se siguen unos pasos muy sencillos en el cambio de los hábitos diarios de su rutina. Por ello, es clave el acudir al dentista con frecuencia para que este pueda indicar las pautas necesarias y el paciente pueda terminar con las molestias de tener la boca seca de forma totalmente definitiva. Esto no solamente supondrá una notable mejoría en su salud bucal, sino que también hará que su calidad de vida mejore considerablemente.