muela del juicio
Por desgracia, son muchos los que experimentan un intenso dolor cuando les empiezan a salir las muelas del juicio. A pesar de que no es algo que le suceda a todo el mundo, sí que hay un gran número de personas que lo pasan muy mal con estos cambios dentro de su mandíbula.
Las muelas del juicio o cordales son aquellas que comienzan a salir en la fase adulta de las personas, aproximadamente desde los 17 hasta los 25 años, y durante ese tiempo, es normal que se sufran molestias y dolores bastante intensos, llegando incluso a la inflamación de la encía.
Por ello, es bastante frecuente que todos aquellos que padezcan de esto quieran saber cómo poder aliviar un poco el dolor o qué es lo que deben hacer para no sufrir tantas molestias en su boca. Las muelas del juicio son piezas dentales que realmente no tienen ningún tipo de función, y cuando aparecen se suele dar que no hay suficiente espacio en la boca para ellas.
Es por esto que a la gente le suele doler, excepto a aquellos afortunados que no tienen que lidiar con ellas en ningún momento de su vida, dándose lo que se conoce como la agenesia dental. No obstante, se debe recalcar que no todas las personas sufren las mismas condiciones, y que la intensidad del dolor o de la molestia puede variar. Hay incluso casos en los que las muelas del juicio salen sin que la persona que las tiene se entere.
Saber cuándo están comenzando a aparecer las muelas del juicio en la boca es mucho más sencillo de lo que parece, pues simplemente con comprobar el final de las arcadas, se puede ver a simple vista cómo están empezando a salir.
Sin embargo, esto no es lo único que indica su presencia, pues estas muelas suelen venir acompañadas de otros síntomas bastante desagradables y que pueden llegar a ser un verdadero quebradero de cabeza para las personas. El primero y el más característico de todos, es sin duda el dolor y la inflamación de la encía, algo que no es especialmente grave, pero que sin duda es muy molesto para todo el que lo padece.
Incluso hay veces en las que la muela queda impactada y se siente dolor en el oído, además de en la boca. Además, si la higiene dental del paciente no es la más adecuada, puede experimentar un dolor mucho más agudo debido a la presencia de caries en sus dientes.
Por tanto, en caso de sufrir este tipo de molestias, es momento de comenzar a pensar que las mueles del juicio están empezando a salir. En esa situación, lo más apropiado es acudir a un dentista de confianza que pueda indicar cuáles son las pautas a seguir. Lo primero que habrá que comprobar es si la salud dental del paciente es la adecuada, y posteriormente observar si la muela del juicio está saliendo como debería y si será necesaria una intervención o no.
Existen muchas ocasiones en las que los pacientes sienten un dolor muy desagradable en la zona donde estas piezas dentales hacen su aparición, por lo que no es de extrañar que se busque desesperadamente una solución para ello. Existen una serie de remedios caseros que pueden ser de gran utilidad, comenzando por una limpieza bucal mucho más intensa y eficiente.
La higiene es uno de los elementos más importantes para un buen mantenimiento de los dientes y de las encías, por lo que jamás debe ser descuidado y menos si están empezando a salir las muelas del juicio. En caso de que estas cordales aparezcan, los tejidos que se encuentran alrededor se hinchan y eso hace que la limpieza diaria pueda realizarse con mayor dificultad.
Por ello, es conveniente combinar el cepillado de dientes con otros elementos como pueden ser los productos del enjuague bucal y el hilo dental. Por otro lado, el acudir a otros productos de carácter natural también puede ser de gran ayuda, como por ejemplo es el caso de ciertas especias como el perejil, las cuales tienen propiedades que ayudan a evitar las infecciones o la acumulación de bacterias. Las bolsas húmedas de té negro también actúan como antiinflamatorio, por lo que pueden ser muy útiles en estos casos.
No se pueden olvidar tampoco algunos medicamentos como los ibuprofenos, los cuales se encargarán de aliviar el dolor durante al menos un par de horas. De igual manera, enjuagarse con agua tibia y salada es un gran remedio casero, así como colocarse un hielo en la zona afectada para bajar la inflamación. No obstante, si el dolor persiste durante mucho tiempo y con mucha intensidad, lo más recomendable será acudir directamente a un dentista.
A pesar de que la existencia de este tipo de remedios ayuda bastante a aliviar el dolor que producen las muelas del juicio, lo cierto es que puede haber casos en los que este persista incluso cuando se
han seguido al pie de la letra los consejos mencionados anteriormente. Las cordales pueden tardar años en salir de forma completa, y cada caso es muy distinto, llegando a haber personas que sufran una molestia insoportable y muy difícil de aliviar.
Acudir a un dentista que pueda indicar cuáles son las pautas a seguir para evitar esta situación es fundamental, aunque también es una tarea que debe ser realizada con frecuencia aunque no hayan salido las muelas del juicio.
No obstante, en este tipo de casos, los especialistas se encargarán de realizar una radiografía dental a los pacientes, de manera que puedan comprobar fácilmente si la cordal está emergiendo como debería. Si esto no ocurriera, significaría que está afectando al resto de piezas dentales de la boca, por lo que tal vez hubiera que proceder a extraerlas para evitar daños mucho mayores.
Es por este motivo que el dolor causado por las muelas del juicio es tan relativo, pues dependerá de la situación de cada paciente, del tipo de higiene dental que tenga, y sobre todo, de si las muelas del juicio le están saliendo de forma adecuada o no. Por tanto, estas molestias podrían durar desde un par de horas, hasta algunos días. En cualquier caso, la mejor solución siempre será acudir a un dentista de confianza y seguir todas sus recomendaciones.